miércoles, 17 de noviembre de 2010

Receta para una connotación veinteañera



¡Qué gustito, qué placer andar en la cocina! Qué goza…! Uy, ¡hola familia! Me pilláis ahora mismo a punto de meterme manos en la masa con una de mis recetas que goza de mayor éxito. Rica, rica y con fundamento. Coged lápiz, papel y prestad atención.

Imagina por un momento que se acerca una efeméride importante. Una de esas para la que debes preparar un regalo digno de tan magno acontecimiento. Pongamos por caso que, por un suponer, cumple primaveras una Entidad. Connota, que suele decirse. Y que, para colmo, estrena dígito en su contador. Que deja atrás los diecimuchos para llegar a los 20, esa edad en la que todo decae y queda colgando a la espera de que la gravedad se apiade de tus carnes. ¿Por dónde iba? Ah, ya.

Son 20 años. No puedes limitarte al típico póster de un tipo presumiblemente de buen ver en paños menores. Es previsible, aparte de zafio y vulgar.




No, ha de ser una mezcla perfecta de gustos. Una de esas combinaciones, a priori imposibles de llevar a cabo, pero que, si los hados se conjuran, dan como resultado algo grandioso para la persona que festeja y es festejada.

Receta:

- Cogemos una de las series favoritas de la Entidad. En concreto, uno de sus momentos más legendarios.



- A continuación, añadir algo de travestismo made in una de las comedias de referencia de la interfecta.



- Algunos podrían suponer que ya con estos ingredientes tendríamos el regalo perfecto… pero no, todavía se puede redondear mucho más.




- A esto, añadamos una gran cantidad de la música preferida de la persona que connota.



- Remover bien, agitar con cuidado y … ¡voilà! Tenemos, al fin, el regalo perfecto para, pongamos como ejemplo, Entigirl.



¿Véis? Nada como conocer bien sus gustos y crear un hermoso pastiche con el que pueda deleitarse una y otra vez. Eso sí, variad la receta según el individuo que os toque. Por ejemplo, en el caso de Entiman, puede que si dierais con una combinación homogénea de Spider-man, Dexter y Los Gandules, tuvierais un gran presente entre manos.

¡Esto es todo por hoy, familia! Hasta …¿la próxima connotación cuando toca? Ah, no, que hay cosas preparadas para antes, cierto. Hasta ¿Navidad?