Seguramente muy pocos lo sepáis, pero ... yo he pasado por una crisis culera.
Sí, amigos. Una vida libre de culos (¿una vida digna de ser vivida? No lo creo). En concreto, de culos dibujados. Todo arranca en 2013, después de realizar una serie de dibujos para rellenar portafolio de cara a visitar el famoso y celebérrimo Salón del Cómic de Barcelona, lugar de Enti y Semi-Entiquedadas míticas. Ya me encontraba bien situado en la gran élite culera. Había participado activamente los años anteriores, y había puesto todo de mi parte para conseguir convertirlo en Tropic Thunder de esos del Tuister. Ah, la vida me sonreía. ¡Los culos me sonreían! ¡Hasta el mío me guiñaba el ojo de cuando en cuando! Sin embargo, una aciaga tarde de 2013, dibujé a Wonder Woman.
Como podéis ver, unas nalgas prietas, estrelladas y bien turgentes. De esas que pueden dejarte inconsciente sólo con pensar en palparlas. Un culo de esos dignos de un #BigCuloDay, vamos.
"Jo, qué posaderas más bien conseguidas. Ni hechas con compás, oye", pensaba, orgulloso de mi trabajo y sin poder llegar a imaginar lo que vendría en meses venideros.
Algunos dicen que, cuando tocan techo en su vida, luego pueden entrar en un periodo de crisis vital importante, que nada les sale a derechas, que no funcionan las cosas como debieran. Ese culo fue mi techo. Y, desde ahí, el abismo.
Yo lo intentaba. Me forzaba a ello. Pero no. No había manera. Por más que ponía todo de mi parte, no conseguía dibujar ni un mísero culo. Entre en una crisis profunda de la que pensaba que ya no tenía salida. Y no se puede decir que no pusiera de mi parte. Me decía "dibuja a Gonder Coman otra vez y ya verás cómo el culo te sale solo".
Y me salían planos frontales. ¡Frontales! ¡De Gonder Coman! "Bueno, no pasa nada. Mira, ahora Marvel ha sacado a Thora, un Thor chica. Igual, al ser menos tópico, te aparece su culo sin apenas esfuerzo".
Sin embargo, en blanco. ¡La pongo de espaldas, y directamente NO LE DIBUJO CULO! ¡Ni siquiera lo insinuo!
"Bah, no te vengas abajo. Piensa en los clásicos. En Batman y Robin, por ejemplo. De ahí tiene que salirte un culo, es una pieza clave en su relación".
Nada. Mucho sigilo ninja, mucha sonrisilla de Robin insinuando fetichismos de puños, pero ni media nalga.
"Tío, Spider-man. Ya sabes lo dado que es Spider-man a ponerlo en pompa como si tuviera ahí el sentido arácnido".
Y lo que hago es un homenaje a la portada de "Amazing Fantasy 15" en una postura totalmente frontal que no muestra sus azuladas formas traseras.
Desistí. Me dije: "No lo fuerces. Ahora mismo no te salen traseros en tus dibujos, pero seguro que cuando menos lo pienses, te saldrán prietos y apretujables como antaño". Así que decidí dejarlo y centrarme en otras cosas.
Con motivo de la aparición del segundo número de
"Magnificent 7+1", ambientado en el oeste americano, opté por escribir y dibujar una historia completa. Como no quería forzar el tema culero (aunque me atormentaba en sueños en los que miles de nalgas me perseguían abriéndose y cerrándose como pirañas escatológicas ávidas de amor), mi protagonista sería un hombre entrado en años, con lo cual la tentación sería mínima. Después de mucho trabajo, terminé la historia casi sin darme cuenta. La leo, la reviso, retoco, la vuelvo a revisar y entonces me percato de un pequeño detalle.
Ahí estaba. El culo de la salvación. El trasero anticrisis. Ahí, camuflado en una nube cuasi-onírica, pero ahí estaba, bien claro, azulado y diáfano. Ahi:
Desde entonces ... ¡ay, amigos! Desde entonces, los culos salen de mi lápiz a chorro. Con deciros que ahora preparo una novela gráfica erótica con culos en CADA PÁGINA ... Vuelvo a ser un hombre completo, un artista feliz, un guardián anal.
Un caballero culero.
(Insertar música de Hans Zimmer)
Y si a vosotros os llegase a ocurrir lo mismo (¡ROB no lo quiera!), no os desepereis. Haced lo que yo y muchos otros hacen para resolver las crisis; ¡Nada¡ ¡Tan sólo esperad a que se resuelva sola! ¡Y seguro que llegaréis lejos en la vida!
¡Feliz Big Culo Day 2015!
May the asses be with you!