Guest Starring: Agustín

Nueva Edición de “Guest Starring” señores. ¡Esto marcha! Los que no os habéis animado todavía, lo haréis con esta nueva aportación: un nuevo relato. En esta ocasión, esto ya no es “Las Entidades’Universe”, es "Agustín’s Universe", y su relato…

INCAUTOS

[...] Su mirada parecía decírselo todo, sus ojos eran ahora su respuesta, la luna asomada, dejó entrever una silueta que parecía desaparecer entre las sombras; él entretanto, dejando ver sus manos, sacó un cigarro y lo único que hizo fue encenderlo, no alcanzó a probarlo ni siquiera, parecía como si algo lo hubiese detenido, luego pudo ver que se encontraba solo, el silencio lo invadía por completo, trataba de ordenar sus pensamientos, pero ya era imposible, su cuerpo no tardó en desplomarse en el suelo, era como si ese cuerpo ya no le perteneciera, como si el ya no formara parte de él, inmediatamente notó como un escalofrío lo invadía, ya nada podía hacer, solo esperar la muerte.

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Steven era un hombre común y corriente, pero que tenía la extraña costumbre de pensar que todas las personas tienen motivos para hacer lo que hacen, un pensamiento bastante extraño; su vida era ordenada y vivía solo, tenía un trabajo pasable y no le gustaba madrugar, y no pasaba un solo día en que no saliera de noche, a caminar, a despejarse, a cortar un poco la rutina en la que vivía.


Una de esas noches, a la salida de su trabajo, Steven caminaba en plenitud por las antiguas calles de Nortdumb, la noche era maravillosa, el cielo despejado, dejaba apreciar las miles de millones de estrellas que habían, y con ellas, a la guía de la noche, la luna; de pronto, nota una extraña sombra que se le acerca con sigilo, el para y observa, mientras que la sombra sigue y se le acerca cada vez mas; "se le ofrece algo" pregunta Steven con voz enérgica, la sombra parece no escuchar, sin embargo, se detiene de repente, "no te acuerdas de mi" responde aquella extraña figura, sus curvas y su falda, dejan entrever que es una mujer, Steven piensa por un momento, y afortunadamente logra recordar aquella joven mujer, un amorío que no había logrado llegar a buen puerto, Susan era su nombre, y la había conocido en un bar, en una de sus tantas salidas nocturnas, Steven le extiende la mejilla, pero ella no responde, solo deja mostrar sus ojos, de lo que parece ser la oscuridad, a Steven lo invade un ligero pensamiento; y recuerda que aquella mujer que está junto a él, había sido estafada por un vulgar timador, por él mismo, inmediatamente también recuerda la noche en la que se conocieron, en donde el le había vaciado su jugosa caja fuerte, de la que pudo extraer cinco millones, pero no con sus manos, sino con su astucia, aquella noche habían quedado en verse para una reunión de negocios, está claro que una importante empresa en la que Steven trabajaba, como lo es el sector inmobiliario a nivel mundial, tuviera excelentes clientes de todo el mundo, Steven no desaprovechó la oportunidad, y le hizo firmar unos papeles que comprometían su mansión de Mines, valorada en cinco millones de dólares; el pensamiento lo abandona, y cuando Steven entra en si, la mujer se encontraba empuñando un revólver nueve milímetros hacia su pecho, Steven parecía mareado, desorientado, lo primero que se le ocurrió fue disculparse pero [...]



Es extraño, porque Steven siempre tuvo la extraña sensación de pensar que todas las personas tienen motivos para hacer lo que hacen, sin embargo, y hasta el día de hoy, se desconoce porque Steven estafó a aquella mujer de la que se enamoró, el dinero es una hipótesis, pero no cuadra cuando se dice que en la cuenta de banco de éste, habían tres millones de dólares antes de la estafa.

Y ya sabéis: las_entidades@hotmail.com