Puzzle de Barcelona: 3 primeras piezas

Día 8:

Después de dormir mejor que en todos los siete días anteriores, apagamos por última vez el despertador del móvil de Entigirl (de verdad que no sabéis lo que motiva despertarse con la canción de Rocky, es como un chute de adrenalina), nos limpiamos, y esperamos a que los Entipadres lleguen a la habitación. Ellos sin embargo ya han madrugado y han comprado apetitosos manjares para llevar en la Boquería. Cuando llegan, terminamos de preparar las maletas, llenamos la mochila que habíamos llevado vacía con todas las compras frikis del viaje, y con los post it de “Posdata, Te Quiero” y las dejamos en la recepción del hotel. Desayunamos (por primera vez repetimos el lugar de desayuno, el mismo que el del día 2) y visitamos la tienda friki que nos faltaba, gran local donde, entre otras cosas, Entigirl consigue su ansiado cómic de los fugitivos. Un rato largo después salimos de allí, y los entipadres compran dulces para dar y regalar. Llegamos a las Ramblas, pero no podemos cargar con más compras y volvemos para atrás. Guardamos las compras en las maletas y almorzamos en el sitio que desayunamos. Todavía sin poder quitarnos la premiere de la cabeza, nos sentamos en la Gran Vía, sintiendo en nuestras carnes el calor que durante toda la semana ha hecho en ese horno llamado Barcelona. Llamamos un taxi, conducido por un extraño taxista, que se excita de manera vergonzosa cuando le decimos de dónde somos, diciendo que él había estado el verano pasado y que le ponía como una perra. Después de eso se hace el silencio, terminal B, facturar equipaje, subir al avión y rumbo a casa. No más pollastre ni carrier. Al menos en un tiempo. Bonita ciudad Barcelona, con muchos sitios que visitar, algo abarrotada, pero aun así disfrutable. Y encima la Entikedada ha sido un éxito. Un viaje redondo.

Día 1:

Llegamos al aeropuerto. Después de todos los controles y de esperar, retrasan el vuelo por mal tiempo. Nos avisan que nos van a trasladar a otro aeropuerto, pero al final, con una hora de retraso sale el vuelo. Llegamos sin problemas a Barcelona, alguna turbulencia nada más. Un taxi silencioso y estamos en el hotel situado en Gran Vía de las Cortes Catalanas, mu cerquita de la universidad. Como es tradición, miramos los canales que tiene la televisión, lo grande que es la bañera y lo dura que es la cama. Como ya es algo tarde para empezar a patear vemos la plaza Cataluña y un trocito de las Ramblas. Cenamos en un italiano de la zona (caro pero rentable), comemos una impresionante pizza Chicago, apuntamos para otro día la apetecible tarta de chocolate de la carta y marchamos al hotel a descansar, donde descubrimos lo excesivamente blanda que es la almohada.

¡Mira, una bota de media caña! (tu tun chisss!)

Día 7:

Día libre, al fin. Lo único que tenemos más o menos previsto es ir al museo de arte moderno. Después de un rato buscando, y de preguntar en una librería en la que Entigirl deja pasar un libro firmado por Scorsese (ni ella misma sabe por qué), damos con el museo que cierra los martes. ¿Qué día es hoy? Ups. Martes. Media vuelta y a echar un vistazo por ahí. Vemos tiendas y tiendas, compramos robots y dinosaurios, y Entiman se separa para quedar con Fran una vez más antes de su marcha de la ciudad condal. Entigirl y progenitores comen en un italiano (¿obsesión? Naaah) y luego, al hotel. Entiman acompaña a Fran a cambiar un regalo y a buscar materiales indispensables para su inminente viaje a tierras orientales. Una vez todos en el hotel, un rápido descanso y vamos por última vez al arco del triunfo para despedirnos hasta dios sabe cuando, de la zona friki. Compramos un libro titulado “El Arte de Canción de Hielo y Fuego”, no sólo porque Corominas tenga un arte envidiable, sino porque la Hija del Viento (Hielo, Fuego, Viento…¿un poquito de tierra le sobra a alguien? ¿Y cuál es el quinto elemento de la naturaleza que mencionan en el trailer de “La Momia 3”, al decir que “esta momia controla los CINCO elementos? Es que no caemos…) incluye un dibujillo, y siempre hay que apoyar a los Entifans, aunque no se lleven un p%to duro. Además, no podíamos irnos de Barna sin una dedicatoria de la artista, que estaba pendiente desde la Entikedada. Algunas compras más y a la Plaza Cataluña, no sin antes sacarnos una foto delante del Teatro Coliseum, donde será el día siguiente la premiere de “El Caballero Oscuro”, con Christian Bale, Christopher Nolan, Aaron Eckhart, Maggie Gyllenhaal…premiere que nos pillará volando de vuelta a casa, porque claro, estos señoritos de Hollywood no tienen corazón y no atienden a unas Entidades cualesquiera. Cuando ardan en el infierno se acordarán de nosotros. Seguimos hacia la Plaza, donde Entigirl ha quedado con una amiga del colegio, y Las Entidades con Carolina para conseguir una dedicatoria. Como no pueden ir ambas va Entiman como sacrificado emisario. Entre la numerosa multitud se distinguen a Carol y a una amiga (sin blog pero con devianart), cuyo nombre no recordamos, pero que firma como Cklo, aunque dudamos que ese sea su verdadero nombre. A ellos se une Fi (las madres ya no usan nombres normales), y se desarrolla una interesante charla que transita entre temas tan suculentos como que Bellas Artes en Barna no es ninguna maravilla, por más fama que tenga desde fuera; temas privados en los que Entiman intentó evitar entrar; responder a la interesante pregunta de “¿por qué os llamáis Las Entidades?” (no es ironía, es una pregunta interesante…lo que pasa es que cuando te la hacen cada vez que te ven, al responderla sientes que te repites un poco, jurl jurl); que qué hacemos por aquí; que de donde somos (existía una importante duda entre uruguayos y argentinos…la eterna rivalidad); despotricar de los libra, que es un signo lamentable, hasta que Entiman desvela que es virgo, y entonces se ceban con nuestro clan, diciendo que somos unos ñoños y unos cabrones, acompañados de unos cuantos “sin ofender” y algún “pero tú no, ¿eh?”. Claro, como ellas no son virgo no tienen que vivir con esa carga ahora, jo. Mientras, una Carolina, todavía contenta y agradecida por nuestro dibujo, nos dedica el libro, y Cklo también, que para eso incluye una ilustración en el susodicho. Chiquillas la mar de simpáticas, a ver si algún día se unen a nuestra sect…digo, nuestro club. Mientras Entigirl constataba lo limitados que son los Starbucks en cuanto a bebidas, tomaba algo en otro sitio con su amiga de nombre floral (no, no es “capullo”…inmaduros) y se despedía de ella antes de coger el tren. Después se une a la femenina fauna artística que rodeaba a Entiman, y tras pasar un agradable ratito con ellas, nos vamos porque nuestros padres empezaban a sentirse un poco abandonados. Damos una vuelta, cenamos y a pasar la última noche en el hotel.

Mañana, nuevas piezas del rompecabezas.

PD: Si alguien ve algo raro en alguna foto, mejor que se lo calle xD

PD 2: Nosotros nos entendemos, tranquilos.