Premios, críticas, premios y alguna que otra f*ll*da:

El domingo de madrugada en España (otros horarios en otros sitios más afortunados), los insomnes pudimos ver y/o escuchar (incluso palpar, si estabas muy borracho y te apetecía acariciar al George Clooney o la Cate Blanchett de la pantalla. Degustarlos ya parece excesivo, aunque no imposible…uy, nos desviamos) la ceremonia número ochenta de los celebérrimos premios de la Academia Norteamericana, bautizados con el nombre de Oscar por Walt Disney. Y se nota que ya está mayor tito Oscar, porque, entre que la gala avanzaba a trompicones y que los premios no fueron excesivamente sorprendentes…pero bueno, por partes. Ya desde las nominaciones la cosa pintaba curiosa., pues dejaban a unos favoritos bastante…ajustados.

Expiación: Una joya de film, llevado con pulso firme por un Joe Wright, absolutamente respetuoso a la alabada obra original. Un prometedor reparto de jóvenes actores y actrices ingleses, que si bien aún no están para un Oscar, si siguen madurando (especialmente Keira Knightley, que cuando rueda con Wright deja todos sus tics a un lado y se convierte en una actriz) serán nominados más de una vez. Destacar a un James McAvoy que soporta estoicamente en sus hombros todo el peso de la trama, a una impresionante Vanesa Redgrave, que con 5 minutos en pantalla eclipsa a quien se le ponga por delante, y sobre todo al gran descubrimiento de la cinta: Saorise Ronan, una niña que debuta con una interpretación espectacular, justamente nominada a los Oscar. Si ya el film a nivel argumental destaca, a nivel técnico directamente apabulla: vestuario, maquillaje, fotografía, un largo plano secuencia a mitad del metraje y por encima de todo, una magnífica banda sonora compuesta por Dario Marianelli, que se ajusta como un guante a lo que ocurre con cada personaje. ¿Cuál es el problema entonces? Pues que el film puede dividirse de manera clara en tres partes: una primera parte sencillamente soberbia, una segunda en la que el ritmo decae, y una tercera en la que se retoma la calidad del comienzo. Eso nos deja con una peli que podía haber sido grandiosa, pero que se queda en muy buena, y que desde luego debía haber contado más para los académicos, más aún después de haber premiado no hace tanto a “El Paciente Inglés”, de temática y corte similar. En resumen, film recomendable si te gusta los dramones románticos. Si no, probablemente no soportes su segunda mitad, ni la cinta en su totalidad.

Juno: peli sencillita y de protagonista carismática y, como decía Joaquín Reyes, estrangulable (una Ellen Page que a este ritmo de calidad de actuaciones puede convertirse en toda una estrella de aquí a un par de años), que se adscribe a esa especie de pseudo-género de cine semi-independiente, por contar en su reparto con actores conocidos (J.K. Simmons, Jennifer Garner, Michael Cera…bueno, semi-conocidos, xD) y dinero de grandes productoras, como Warner o Fox. El semi-independiente es un género que estos últimos años vive su época de esplendor: desde las infravaloradas “El Mundo de Leland” (con Kevin Spacey, Don Cheadle y uno de los muchos “descubrimientos” e ídolos de Entigirl, Ryan Gosling) y “Gracias por Fumar” (anterior film del realizador de Juno, donde Aaron Eckhart, futuro Dos-Caras, se marca el papel de su vida), hasta “The Squid and the Whale” o “Pequeña Miss Sunshine”, su máximo exponente. Pelis que demuestran que también con poco dinero se pueden hacer grandes obras, aunque algunas pequen de pretenciosas o “supermodernas”. Aún así, una película se debe juzgar por lo que es, no por que tenga un mensaje “antiabortista” o conservador (como hemos llegado a leer en muchos sitios sobre Juno). Si eso no perjudica al film, no puede ser un problema del mismo. Es como si decimos que Taxi Driver o El Padrino son caca de la vaca (perdón perdón perdón perdón, nos duele el escribir esto) porque hay gente que mata a otra gente, y que para colmo lo defiende con argumentos como la defensa de los valores de la “familia” o el erradicar la criminalidad de las calles. Si luego son dos peliculones, ¿qué narices importa las ideas que allí se viertan? Juno no es, de ninguna de las maneras, una obra maestra, ni merecedora del Oscar a mejor film, pero es un guión muy bien llevado, con personajes entrañables y bien construídos (desde el primero al último), dirigido de manera algo impersonal por Jason Reitman, quien demostraba más su calidad como realizador en su muy destacable ópera prima ya mencionada. Es posible que esta impresión se te estropee si vas a verla con unas infladas expectativas, pensando que es el “Pequeña Miss Sunshine” del año. Quítate esa idea de la cabeza y disponte a disfrutar con las ocurrencias de Juno y los soberbios diálogos del film (similares por momentos a los de “Las Chicas Gilmore”). Comedia muy recomendable si quieres pasar un buen rato, que no te hace reír a carcajadas, pero sí te dibuja la sonrisa en la cara.

There Will Be Blood (“Habrá Sangre” debía haberse traducido en España, y no la patochada esa de “Pozos de Ambición”) era, junto con la de los hermanos Coen, la gran favorita de este año en todas las galas de premios, especialmente por la labor de su intérprete masculino, Daniel Day Lewis (Gangs de Nueva York, En El Nombre Del Padre…), que muchos calificaban como “la mejor actuación masculina de los últimos 20 años”, algo que en España se pierde con el doblaje, pues el actor basa en 80 % de su actuación en su voz, lo que se nota al ver los trailers o escenas en yutuve. La peli en sí empieza de manera espectacular, con unos primeros 20 minutos casi mudos, en los que comprobamos de primera mano la ambición del protagonista, pero una vez la trama comienza a desarrollarse el ritmo narrativo decae y muchos son los momentos en que apenas pasa nada. La atención del espectador se dispersa con las 4 o 5 subtramas y no se centra en ninguna, algo que se nota en un film de dos horas y media lentamente dirigidas por P. T. Anderson. Es una buena película, con momentos de auténtico clásico (el momento de la resolución de la trama del hermano, los diálogos con el predicador (excelente Paul Dano, con un papel en las antípodas del niño “mudo” de “Pequeña Miss Sunshine”) o el “bautismo”del protagonista), pero más gracias al trabajo actoral que a la labor de Anderson, al que se le van las riendas del film en determinados momentos, sobre todo en su polémico final (que a nosotros nos gustó, ojo), donde parece que no sabe como concluirla y deja que los dos protagonistas se desmelenen llegando al histrionismo, haciendo que el espectador dude entre asustarse por Day Lewis o reírse por lo chocante que resultan estos momentos finales, demasiado distintos al tono del film en su conjunto. Eso sí, a falta de poder oírla en versión original, el poderío en la pantalla de Daniel Day Lewis es abrumador, sin nadie en absoluto que pueda hacerle la más mínima sombra, dando lugar a una mezcla entre el carisma cinematográfico de Brando, el método extremo de De Niro y el histrionismo (en su conclusión especialmente) de Al Pacino, pero sin llegar al nivel de estos tres monstruos. Y eso hace que cualquier peli sea recomendable. En resumen, película de ritmo irregular, con momentos grandiosos y un actor principal que desborda todas las expectativas más optimistas, pero que queda ensombrecido por la lentitud del desarrollo de la trama (el vídeo que viene a continuación es una muestra del descojone y la polémica que ha despertado el final del film, sólo recomendable para quien la haya visto, o no tenga interés en verla).



De las 5 favoritas, esas son las vistas hasta ahora. Michael Clayton no nos llama (y nos cae bien Giorgio, que conste, pero las críticas no han sido muy entusiastas) y “No Es País Para Viejos” caerá en breve, aunque tampoco nos atrae, y eso que hemos sido fans de los Coen toda la vida (algunas de nuestras películas favoritas son “Fargo” o “Muerte Entre Las Flores”, de visión obligada para cualquiera), de su humor absurdo y surrealista, y de su estilo particular a la hora de dirigir, pero todo esto es algo que, en los trailers que hemos visto hasta ahora, no aparece por ningún lado. Es que no parece un film de los hermanos Coen, y eso la sume en el terreno de lo normal, no de lo destacable. Aún así son impresiones previas, que es probable que cambien al verla…o no. También habría que tratar las injustas olvidadas en nuestra opinión. De Zodiac ya hemos hablado hace poco, pero sólo constatar lo absurdo que nos parece el que no hayan nominado a NINGUNO de los actores protagonistas, el mejor reparto masculino del pasado año, y con diferencia (mínimo Downey Jr. debía haber competido con Bardem en la categoría de intérprete secundario). Otras de las que se ha hablado son “Promesas del Este” y “American Gangster”, pero a nosotros no terminaron de convencernos ninguna de las dos, así que su ausencia nos parece justa. “Promesas del Este” cuenta con un guión poco consistente, y avanza de manera muy lenta hacia un final tramposo. Lo único destacable es la escena de la sauna y la interpretación de Viggo Mortensen (Naomi Watts pasa por allí, y mira que nos gusta esta actriz, pero en este papel no destaca nada), de resto está muy por debajo de “Una Historia de Violencia”, el anterior trabajo de Cronenberg. Eso sí, a los fans del realizador probablemente les chifle. Igual ocurre con “American Gangster”, con la diferencia de que esta sí es una buena película, sólo que absolutamente intrascendente. La mejor crítica que hemos leído de ella era de un lector de Fotogramas, que decía lo siguiente: “Me encantan los personajes, me encantan los actores y me encanta lo que hace Scott, pero ya he visto como 15000 películas de polis honrados y gangsters con un par, y todas eran mejores que esta”. Pues algo así pensamos nosotros. Destacar también que, aun teniendo unas cuantas nominaciones, “Ratatouille” merecía alguna más. Incluso la sacaríamos de ese estúpido guetto que han creado para los films animados (las nominadas a “mejor película de animación”) y la meteríamos en la candidatura grande: la de Mejor Película, ahí, con un par. ¿O acaso lo merece menos que Michael Clayton, Juno o Expiación? Están las nominadas, las olvidadas…

Y luego está Sweeney.





“Sweeney Todd” es, con toda seguridad, el mejor musical que hemos podido disfrutar en un cine desde hace años. No sólo lo disfrutarán los (muchos) fans de Tim Burton, sino los amantes del musical, y sobre todo, del buen cine. Se sigue confirmando la teoría de que la dupla Burton-Deep es una de las más compenetradas de la actualidad, pues sus trabajos conjuntos suelen ser los mejores de ambos (y ya van 6: Eduardo Manostijeras, Ed Wood, Sleepy Hollow, Charlie y la Fábrica de Chocolate, La Novia Cadáver y ésta). En esta ocasión, Burton se muestra más serio de lo habitual, e incluso con un punto siniestro, esforzándose al máximo porque esta versión cinematográfica no parezca un teatro puesto en la pantalla, sino que tenga entidad (ovación, por favor) propia como obra cinematográfica, algo de lo que el carismático realizador sale victorioso, pues su Sweeney Todd es puro cine. Habrán quienes se quejen del exceso de canciones, acostumbrados a otros musicales como Hairspray o Chicago, donde la acción no dependía tanto de los números musicales, pero es que en ésta son vitales para el desarrollo de la trama, resultando todos ellos imprescindibles, sin que sobre (o falte) ninguno. Además, Burton ya quitó todo lo innecesario, dejando las 3 horas del montaje teatral en poco más de dos (y eliminando “The Ballad of Sweeney Todd”, una de las canciones más representativas de la obra), para dar una mayor fluidez al transcurso de la historia, con escenas tan memorables como las de las canciones “By The Sea” (mmm, bañadores victorianos), “Epiphany” o “The Worst Pies in London”. A nivel interpretativo, todos dan lo mejor de sí: Depp realiza una de los mejores papeles de su carrera, creando a un Sweeney amargado y trágico, que evoluciona hacia un psicópata sediento de sangre que sólo anhela venganza, ignorando cualquier otra distracción. Helena Bonham Carter demuestra que no sale en la película por tirarse a su marido, pues se convierte en la gran revelación de la película, ya que tanto su interpretación como su trabajo musical son simplemente espectaculares. Alan Rickman, Timothy Spall, un soberbio Sasha Baron Cohen (la otra revelación del film, pues no sólo da vida a Adolfo Pirelli de manera deliciosa, sino que para colmo es uno de los mejores cantantes del film, con una variedad tonal y una voz apabullante) o el chaval que interpreta a Ed Sanders…todos cumplen su cometido sobradamente, creando un conjunto muy compacto y sólido. El por qué del olvido de la Academia no hace falta ni decirlo, pues la sangre desborda la pantalla en su segunda mitad, y eso siempre es un claro sinónimo de “nulas opciones de Oscar” (a no ser que toque homenajear al director que toca, como Martin Scorsese el año pasado, a quien ni jarto de vino la Academia le hubiera dado el Oscar por “Infiltrados” hace 10, 20 o 30 años), lo que demuestra que estos premios, a pesar de ser los más importantes de la industria, no son sinónimo de “lo mejor del año”, como se ha constatado en más de una ocasión. “Sweeney Todd” es uno de los mejores trabajos de la carrera de Burton y de Deep, tanto juntos como separados, y una de las más destacables películas de lo que llevamos de año, si no la más, tanto para incondicionales del universo Burton como para sus más acérrimos detractores. Una gozada pagar una entrada para esto (la entrevista que sigue a continuación es una muestra de lo bien que se entienden Burton y Depp, simplemente con una equivocación de la periodista, que en vez de decir una década dice 10 décadas).





Con estos precedentes (de 4 páginas de Word…los dedos duelen), estos Oscars se presumían como los más inciertos y presumiblemente inesperados de los últimos tiempos. A pesar de sus 8 nominaciones, ni “No es País…” ni “Pozos de Ambición” las tenían todas consigo, pues otros trabajos, como Juno, Michael Clayton o Expiación, con menos candidaturas, eran capaces de dar la sorpresa: Juno por carismática. Clayton por George Clooney, que cuenta con el beneplácito de todo Hollywood. Y Expiación por tener una temática muy del gusto de la Academia, aunque sus posibilidades quedaban reducidas a nada al no estar nominado injustamente su director Joe Wright. Sólo estaban claros unos pocos: el de Daniel Day Lewis, el de Bardem y que el de guión original estaría entre Juno y Ratatouille. Incluso había dudas entre Ratatouille y Persépolis como mejor film de animación…

Al final, los Oscars resultaron en parte sorprendentes, en parte previsibles. La Academia sorprendió al premiar los efectos especiales de “La Brújula Dorada”, por encima de los muy superiores de “Piratas” o “Transformers”. Sorprendió al premiar al “Ultimátum de Bourne” con 3 Oscars, convirtiéndola en la segunda película más premiada de la ceremonia. Sorprendió en los apartados femeninos, especialmente en el de actriz secundaria, donde Cate Blanchett y Amy Ryan partían como favoritas y veían como se lo quitaba la gran Tilda Swinton por Michael Clayton. El (merecidísimo) Oscar a Marion Cotillard no era tan sorprendente, y más después de ver “La Vie en Rose”, donde la actriz transmitía como pocas, y sin basar su actuación en su notable maquillaje (¿Charlize Theron?), todo lo que la diva Edit Piaf era capaz de dar dentro y fuera de un escenario. Pero de resto, la Academia jugó sobre seguro, y si el año pasado tocaba homenajear a Scorsese, este 2008 es el de los Coen, no sabemos si merecida o inmerecidamente, pero tampoco creemos que “No Es País Para Viejos” sea mejor que “Fargo”, por ejemplo. 4 premios se llevaron los hermanos para su casa: mejor film, director, guión adaptado y actor secundario. Y el resto, a repartirse como la pedrea del sorteo de Navidad, entre Pozos de Ambición, Juno, Expiación, Sweeney Todd, La Vie en Rose o The Golden Age.


En cuanto a la quiniela, The Oscar goes to……… Entigirl, con 8 aciertos sobre 13, quien supera a Entiman, con 6 míseros aciertos. Y todo esto sin haber visto ni Pozos de Ambición, ni Juno, ni muchas otras favoritas, lo que tiene mérito :p. ¿La revancha? El año que viene.

Hablando de premios, últimamente hay por la blogosfera una epidemia de premios que hace que cada blog se lleve 2 o 3 en un mes, y repetidos. Eso nos ha pasado estas últimas semanas, en las que Merrick (ganador encuestil y tomatero de profesión) nos galardonó con (de nuevo) el “Blogger del Día” y el de “Arte y Pico”, que hace más ilusión si cabe, y Carolina con el de “No es un mal Blog”, que con ese nombre la verdad que embajona un poco (es que parece dicho con desprecio, xD). Como ya en su momento dimos el de Blogger del Día a algunos afortunados, en este haremos trampa, y premiaremos a 9, 3 de los cuales se llevarán un mismo premio, intentando además que no hubieran sido premiados la vez anterior. ¿Lioso? Bueh, como si no nos conocierais...

The Arte Y Pico Award goes to…

- Desiree Delgado
- La Sonrisa de Chesire
- El Mundo de Mike

The Blogger del Día goes to…

- Beautifull Willow
- Un Tipo en una Seta
- El Deili Planet

And the “No es un mal blog” goes to…

- Hell's Kitchen
- Miscelánea
- Comikerias

Creednos, sobran justificaciones. Los de Arte y Pico hacen honor a su nombre, y los otros seis son blogs sencillitos y humildes (algunos dando sus primeros pasos), que merecen reconocimiento por su honestidad, calidad y esfuerzo ;)

¡Gracias a todos queridos amigos por asistir a este inolvidable entrega de premios! ¡Esperemos que hayáis pasado una entretenida velada en compañía de nosotros!

Plasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplasplas

¿Se han ido todos ya? Bien, para los que no os habéis levantado de los asientos, una aclaración: la f*ll*da del título existe, pero no cabe hoy, así que puede caer en cualquier momento. ¿Cuándo? Ahhh, sólo podemos decir que será pronto, que se está extendiendo por toda la web y que sus protagonistas son…(error mensaje. Falta texto)

Continuará…