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Sobran las palabras. Que GRAN artista...Descansa Ringo, descansa en paz.
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La frontera es tu imaginación.
De momento solo soy terrícola.
Ni español, ni europeo, ni latino, ni flamenco, ni siquiera occidental.
Sólo soy un terrícola que sueña con ser lunático
y, aunque seguro que jamás llego a ser marciano,
cuando sea espíritu seré espacio,
y si veo que el infinito me agobia,
echaré un vistazo en uno de esos agujeros negros que dicen,
que hasta la luz se traga.
Mi ayer, mi verdad, mis principios
vienen y van,
y se van cada vez por mas tiempo.
Tan llenos de simples verdades,
tan fácil si sabes hacerlo.
Mi aquel y mi allí,
mis principios,
vienen y van,
y se van cada vez por mas tiempo.
Pero cuando sea espíritu seré espacio.
Y si veo que el infinito me agobia...
te llamaré,
o me llamarás.
Echaremos juntos un vistazo en uno de esos agujeros negros que dicen
que hasta la luz se traga.
Pero yo cuando muera,
Cuando sea espíritu seré espacio.
Cuando sea espíritu... seré espacio.
Cuando sea espíritu seré espacio.
Y ya no tendré que pararme en tu frontera.
Y ya no podrán hacerme mas daño.
Alejandro Sanz. “Cuando sea espacio”. Grandes éxitos 91-04. CD 2
Ay que pereza. Sí señores, ya estamos de nuevo por aquí, en época intervacacional (ya que en una semanita nos volveremos a marchar, en esta ocasión para los madriles, a ver la capital por vez primeraJ), después de 10 días de asueto en los que hemos aprovechado para recargar pilas, moreno e ideas (además de adelantar la que será la mejor novela gráfica de la historia de la humanidad...y van 165 páginas dibujadas...y no vamos ni por la mitad...uf...¡tiembla Absolute Watchmen!). Volvemos renovaditos, con muchas ideas que intentaremos comenzar ahora y proseguir a la vuelta, comprobando gratamente sorprendidos que por primera vez las visitas no descienden de manera alarmante en nuestra ausencia. Eso sí, no podemos prometer nada sobre si mañana colgaremos algo por aquí, pues estaremos toda la jornada de celebración, aunque intentaremos tener algo para mañana por la mañana. Recordar que además este inminente 28 se acaba el plazo de la encuesta, por lo que también el del sorteo del misterioso premio sorpresa que no creo que sea tan sorpresa, y para el que de momento hay 4 participantes: The Nobody, Cataplaf, Flowtista (tu dibujo estará coloreado en breve ;) ) y UltimateY.
Por último, destacar un par de cosas que, bien por pillarnos a punto de irnos, bien por ocurrir en nuestra ausencia, no hemos podido reseñar por aquí. El primero, el homenaje que Flowtista ha hecho en su blog a la Entidad Masculina (Dios sabrá por qué), con dibujo personalizado incluido (el que acompaña a este texto) aunque totalmente alejado de la realidad (pues todos sabéis ya cómo son Las Entidades), que agradecemos profundamente. Y segundo, la mención de esta humilde a la par que prestigiosa bitácora en una entrevista que Chacal, uno de los mejores y más prolíficos bloggeros que uno puede leer, ha concedido a los chicos de “+ Que Cómics”, donde nos incluía entre sus lecturas blogeras habituales. Un honor, y lo mismo va por nuestra parte, pues es una de las pocas páginas que seguimos diariamente.
Vuestros días de incertidumbre han terminado. Ya hemos vuelto. Temblad.
¡Que tembléis coñe ya!
Bueno, bueno, bueno. Pues ya ha terminado la surrealista encuesta titulada “¿Cuál de estos cantantes consideras más soportable?”, y los resultados son los siguientes:
- Fito y Fitipaldis: 7 votos
- Avril Lavigne: 5 votos
- Shakira: 4 votos
- Manolo García y Jaime Urrutia: 1 voto cada uno
- David Bisbal y David Civera: ni un voto (una risa cruel se nos escapa...)
Como ya dijimos en su momento, esta sería una encuesta con estímulo, en la que los votantes podrían participar en el sorteo de un dibujo realizado por la Entidad Masculina (de la que son gran parte de los dibujos que acompañan a los posts) si dejaban su nombre en este post. El sorteo ya se ha realizado, según el legendario rito ancestral de escribir los nombres de los 3 participantes (18 votantes y 3 participantes, uyuyuy, algo no cuadra) en tres papelitos y que una mano inocente (de verdad que es inocente, palabra) elija uno al azar. Los nominados son:
- Cataplaf
- Flowtista
- Una ama de casa con ligeros brotes psicóticos, k acaba de matar a su marido
Y la persona elegida al azar es...¡Flowtista! Felicidades al chavalín (que ahora se encuentra de vacaciones lanzaroteñas) y marchando su dibujo que le llegará a su e-mail en breve.
Y como siempre, cuando algo termina algo nuevo comienza. Inauguramos nueva encuesta, que durará también 2 semanas, y de nuevo con aliciente. Pero esta vez no diremos en qué consiste, aunque ya lo sepamos. Para participar en el sorteo bastará con dejar un comentario confirmando el haber votado (o no, que cada cual es libre de hacer lo que su cuerpo le permita) en cualquiera de los posts que publiquemos de aquí a que las votaciones se cierren. Pues eso, ¡a votar se ha dicho!
PD. La encuesta termina el 28 del 8, día especial para una entidad, así que a aplicarse el cuento, XD
“Harry Potter and the Deathly Hallows” ya ha caído. Pero no esperéis ver una reseña por aquí, si es a eso a lo que habéis venido. No pienso spoilear ningún mínimo dato de la trama, nada de lo que los fans ansían conocer, si tal personaje vive o muere o cualquier otra incógnita. Me parece irrespetuoso para los muchísimos seguidores de la saga del niño mago revelar los secretos de un libro tan anhelado por muchos, y cuya publicación española se dice que no tendrá lugar hasta febrero del 2008, en una habilísima jugada de la editorial Salamandra, que parece no tener la más mínima intención de aprovechar la época navideña para sacar aún más rentabilidad de tremendo best seller (si eso es posible). Así que no voy a reseñar “Las Reliquias Sepulcrales” (título más que apropiado) en este post.
¿Entonces en que consiste este texto? Pues básicamente en el comienzo de una despedida que será completada cuando el séptimo libro vea la luz en castellano, de uno de los personajes de ficción que más ha marcado mi adolescencia. Yo fui uno de esos niños que leyó el primer ejemplar cuando a Harry no lo conocía ni el librero que me lo vendió, quien lo tenía entre la sección de literatura adulta porque no sabía de qué narices iba el susodicho libro. No se formaban grandes colas para comprar sus novelas, y sobra decir que no existía ningún rumor sobre una posible adaptación al celuloide. Simplemente yo era un niño de 11 años al que los Reyes Magos le dejaron una novela que gozaba de buenas críticas en el Reino Unido, que prometía ser el principio de una septualogía que no sólo homenajearía, sino que renovaría el olvidado género de la literatura fantástica (renovación que culminaría el inmenso éxito de la trilogía del Señor de los Anillos, dotando a dicho género de una energía y de una legión de seguidores que aún perdura), todo esto a manos de una desconocida autora inglesa llamada J.K. Rowling, quién se encontraba sin un mísero penique cuando la historia potteriana llegó a su mente, clara y perfectamente perfilada, historia que sólo tuvo que dividir en los 7 libros que la compondrían, algo que la escritora no se cansaría de confirmar en años posteriores, cuando la fama y la fortuna llamaran a su puerta. Rowling siempre reiteró que la historia de Harry era una historia cerrada y que, una vez concluida no tenía la más mínima intención de continuarla, por más que fuera a echar de menos al personaje al que tanto debía.
El primer libro consiguió engancharme como hacía tiempo que ninguno lo conseguía, pues en aquella época me encontraba bastante desenganchado de la lectura, lo que no quiere decir que no leyera, sino que en comparación con el hábito literario que tenía desde pequeño el interés por éste había menguado a favor de una literatura más “secuencial”. Personajes como Voldemort (un villano que, a pesar de estar enmarcado dentro de la literatura infantil, resulta una creación genial, más aún cuando con el paso de los libros nos vamos enterando de su origen), Snape (probablemente el personaje más complejo a la par que ambiguo de la saga, y uno de mis preferidos) o Dumbledore (personaje determinante durante toda la historia, que al igual que el Gandalf Tolkieniano siempre parece tener siempre un plan de antemano, y que desborda carisma de manera apabullante (es mi personaje favorito de toda la trama, para que negarlo)) demostraban que Rowling tenía bastante talento a la hora de definir sus personajes a la par que su historia, que a pesar de ser autoconclusiva dejaba las semillas plantadas para el desarrollo de ese universo, cuyos pilares ya estaban establecidos en la primera novela.
Pasaba el tiempo. Con “El Prisionero de Azkabán” comienza a quedar de manifiesto el fenómeno Potter, cada vez con un mayor nº de seguidores, precisamente con la novela que marca el primer punto de inflexión de la saga, y el comienzo de lo que yo veo como “el segundo bloque temático”. Si en el primero (compuesto por “La Piedra Filosofal” y “La Cámara Secreta”) se narraban aventuras infantiles a la vez que se establecían los cimientos de este universo, en el segundo (que integran “El Prisionero de Azkaban”, “El Cáliz de Fuego” y “La Orden del Fénix”) la oscuridad se apodera de la saga. Dementores, Mortífagos, Thestrals (criaturas a las que sólo pueden ver personas que han visto la muerte), e incluso una escena desarrollada en su totalidad en un cementerio donde se lleva a cabo un sangriento ritual que conllevará el regreso de “El Que No Debe Ser Nombrado” marcan el tono de tres novelas en las que elementos del pasado y del presente de los personajes se entremezclan, dando lugar a un mosaico cada vez más complejo. Es en el tercero donde surgen 2 de los personajes más carismáticos y queridos por los fans: Sirius Black y Remus Lupin, ambos procedentes del pasado de Harry Potter, mostrando claramente que son tan importantes los hechos presentes como los pasados para el desarrollo de la trama. Los orígenes de las amistades y enemistades entre los personajes marcarán, para bien o para mal, su devenir y la conclusión de una historia cada vez más complicada. El término “muerte” comienza a ser casi tan protagonista como el de “magia”, no sólo por lo que la vuelta de Voldemort representa, sino por lo que afectan a Harry las muertes que se dan en “El Cáliz de Fuego” y, sobre todo, en “La Orden del Fénix”. La de Sirius Black, por muy criticada que haya sido, es necesaria para el desarrollo de Potter como personaje a la hora de asumir este hecho como algo natural. No es una muerte anecdótica, escrita al azar por la autora porque le apetecía. Sirius Black era la persona más querida por Harry y por los fans. Matándolo, Rowling demuestra, no sólo que nadie está a salvo (ya que esto es una guerra), sino que esto ya es cada vez menos una novela infantil, y que no todos vivirán felices y comerán perdices.
Con “El Príncipe Mestizo” (una de las mejores novelas de la saga), Harry Potter comienza a entonar su canto de cisne. Rowling inicia un nuevo y último bloque, desvela algunas cartas que había ocultado sabiamente a lo largo de los libros anteriores (cartas que comienza a desvelar con la profecía, y que la relectura de los libros anteriores demuestra que Rowling no improvisa, pues todo está ahí, oculto a simple vista), y no se corta en desvelar cerca del final de este sexto libro en qué consistirá la última aventura. Es un bloque tan sólido que cuesta pensar en él como 2 libros separados, sino más bien como uno sólo que abarca más tiempo del habitual. Este sexto deja bien a las claras la importancia de tres personajes en la conclusión de la saga: Voldemort (que es prácticamente coprotagonista de “El Príncipe Mestizo” aunque no aparezca), Snape y Dumbledore, quien encomendará a Harry una misión tan complicada que romperá por completo los esquemas fijos de todas las novelas en la última entrega. Entrega de la que, como ya he dicho, no hablaré...todavía.
Con el tiempo, Harry Potter se ha convertido en un icono mediático. Un producto de marketing. Un revienta-taquillas. Un incordio para muchos. Pero para mí, en esta última novela, como en cada una que le precede, sigue siendo ese cercano personaje, protagonista de un genial universo, que ha crecido y madurado conmigo a lo largo de todos estos complejos años. Un colega, un amigo de papel al que conozco como la palma de mi mano y del que recientemente me he tenido que despedir para, como ocurre con muchas amistades, no verlo nunca más. Adiós Harry...y buena suerte.
Viernes pasado. Después de terminar de oír uno de mis CDs habituales últimamente (de los que espero hablar en breve), decido poner unos minutos la radio para hacer tiempo entre que termino de dibujar y voy a cenar. Así que pongo la SER, porque el resto de emisoras no hacen sino hablar de intrascendencias a cual más inútil, o no cesan de repetir canciones a cual más lamentable. Con lo que, por descarte, me quedo con la de Polanco.
Termina la publicidad y continúa uno de esos programas-suplentes veraniegos que intentan ser frescos con temas insulsos, para lo cual... ¿qué mejor que echar mano de uno de los temas de moda? ¡Los cómics! Así que creamos una sección semanal en las que hablemos sobre esos personajes frikis, cuyos seguidores no nos oirán porque estarán enganchados al ordenador jugando a un videojuego ultraviolento mientras oyen música super-mega-heavy-que-te-cagas. Porque eso hacen los jóvenes, ¿no?
“Bueno”-pienso con ese optimismo que me caracteriza y que tantos chascos suele darme- “dudo que el espacio lo lleve gente experta en el tema, pero al menos, aunque sean neófitos, que lo hagan habiéndose informado un poco antes de abrir la boca en antena”.
Obviamente me equivoqué.
He aquí algunas perlas soltadas por el colaborador responsable de dicha sección, que además parece que será fija durante todo el verano. Tema: los 4 fantásticos y Batman.
- El poder de Mr. Fantástico es la telequinesis, poderes mentales que le sirven para ser el líder del grupo. Esto se contradice con lo que después dice el colaborador, que acertadamente afirma que el grupo se basa en los 4 elementos de la naturaleza: agua, aire, tierra y fuego. ¿Y el agua que tiene que ver con poderes mentales?
- La Antorcha Humana se llama “El Hombre del Fuego”.
- La Cosa es en realidad “La Mole”, que después debido a su fama evolucionó a “La Masa”, consiguiendo colección propia y haciéndose famoso por la serie de TV.
- Los actores que interpretaban a los 4 F en el film eran Chris Evans, Michael Chiklis, Jessica Alba y Julian McMahon (en conclusión, que a Mr. Fantástico le den bien).
- La última película estrenada de Batman fue hace un par de años y se llamaba “Batman Returns”, con partitura de Danny Elfman.
Y eso sólo en 5 minutos de sección, durante los cuales iban intercalando canciones de las susodichas películas. ¿De verdad cuesta tanto informarse un poco antes de llevar un espacio dedicado ÚNICA Y EXCLUSIVAMENTE al cómic? ¿O es precisamente por eso, por estar enfocado al noveno arte, por lo que se la trae al pairo informarse un poco antes de entrar en antena? ¿Si hubiera sido sobre cine, música o literatura hubiera sido igual? Es una situación que siempre me canso de repetir y que a veces llego a pensar que estoy loco, o que soy el único que la ve, pero el cómic parece cada vez más lejos de salir del guetto en el que parecen estar condenados, más aún con esta moda de las películas, que hacen que muchos ignorantes (con perdón, que no pretendo tampoco insultar a nadie) sobre el tema se crean que lo saben todo, y que tienen el derecho a opinar sobre esto. Y lo peor es que lo que parecía que sólo se centraba en conversaciones entre colegas ahora parece estar extendiéndose a los medios de comunicación, con la difusión que conlleva esto, pues si algo es cierto es que para el público, en los medios de comunicación hasta la ignorancia es válida.
Antes que nada, para todos aquellos que tengan alergia al género romántico (aunque no creo que sea inteligente aborrecer un género en especial, ya que hay buenas películas en todos los géneros, ya sean románticas, de terror o del oeste...pero bueno, al grano), destacar que, aunque (obviamente) tiene un mucho de romántica, “El Diario de Noa” es un lacrimógeno drama, y por encima de todo, una gran película.
Entremos un poco en materia: “El Diario de Noa” (“The Notebook” en su versión original) está basado en un best seller escrito por Nicholas Sparks, del cual, al igual que con “Guía del Autoestopista Galáctico”, jamás había oído hablar (y parece que últimamente sólo me ha dado por comentar películas basadas en best sellers, porque la próxima también será de ese estilo). El film narra la historia de Allie Hamilton, una joven adinerada que, junto a sus padres se traslada a un pueblecito costero para pasar el verano. Allí conocerá a Noa Calhoun, quien nada más ver a Allie sabe que están destinados a vivir juntos. Así, gracias a las imprudencias y las románticas locuras que éste realiza para llamar la atención de la chica, Allie acaba perdidamente enamorada del muchacho, dando lugar a un verano de ensueño.
Lamentablemente, el verano ha de terminar. Una serie de circunstancias (el estallido de la Segunda Guerra Mundial, la reticencia de los padres de Allie a que su relación con Noa prospere...) hace que los dos jóvenes acaben distanciándose, pero el recuerdo de aquel inolvidable verano sureño acabará pesando en sus vidas más de lo que ellos pudieran sospechar en un principio.
Sí, en un principio podría parecer que la historia en sí no tiene mucho de original: un drama romántico de los de toda la vida, con sus problemas y que al final tendrá un bonito final feliz (oooooooooh!!). EEEEEERROR. “El Diario de Noa”, por simple que pudiera parecer, tiene mucho más de lo que aparenta. Su director, Nick Cassavettes sabe muy bien lo que se hace (no en vano es hijo del legendario realizador de Hollywood John Cassavettes, e incluso su madre, la inconmensurable Gena Rowlands, hace un papel clave en el film, que no revelaré para los que no se sospechen el devenir de la historia, no excesivamente imprevisible, para qué nos vamos a engañar), y narra esta lacrimógena y tormentosa relación entre dos personas condenadas a entenderse, a estar juntos por siempre, con una sencillez y sensibilidad que apabulla, que hará estremecerse al espectador menos romántico, y que maravillará a los más soñadores, pues no creo que deje indiferente a nadie. La película va saltando hacia delante y hacia atrás en el tiempo de una manera muy inteligente, sin perder nunca el núcleo central de la narración, hasta que llega un momento donde todo comienza a cuadrar, donde uno ya se huele como acabará el film antes de que acabe, donde el director consigue que una historia que, en manos de otro realizador no pasaría de un film típico de sobremesa, nos sorprenda y nos mantenga enganchados hasta el demoledor final (que para el que sea mínimamente avispado, no le resultará excesivamente sorprendente, como ya he dicho antes).
Mención aparte la labor de los intérpretes, pues no hay nada más importante en un buen drama romántico que una buena elección del reparto, la química entre éstos y, por encima de todo, que se encuentren especialmente inspirados en sus papeles. Todo eso se da en esta excelente película. Tanto Rachel McAdams (mucho ojito con esta actriz, que tiene pinta de que será una de las grandes intérpretes de su generación, y si no, al tiempo) construyendo a la perfección el papel de una encantadora y aniñada niña rica, como el excelente Ryan Gosling, nominado al Oscar por Half Nelson (film que nunca llegó a mi ciudad...ya uno se acostumbra, ¿qué vamos a hacer?)) dando vida al carismático Noa del título, personaje complicado de interpretar debido a los continuos cambios que sufre a lo largo del metraje del film, lo bordan en sus roles, pero es que el reparto de secundarios no se queda atrás, con unos perfectos (y veteranos) Gena Rowlands, Sam Shepard o Joan Allen, creando unos personajes que respiran vida, que transmiten, dando lugar a uno de los mejores repartos hollywoodienses de los últimos tiempos.
Resumiendo que es gerundio, un drama romántico perfecto para ver acompañado, y no muy recomendable para verla después de romper con alguien porque, aunque seas un tipo duro, te puede dar la llorada (es más, te puede dar la llorada aún estando acompañado, pues tiene sus momentos muy lacrimógenos, así que aviso). Avisados estáis.
PD. Por cierto, a partir de este post, las entregas de esta sección serán quincenales, para así tener más tiempo de preparar otros posts más variaditos, que entre esta sección y la de “Grandes Canciones...” no me da tiempo a escribir otra cosa...:p. Para compensar, adelanto cuál será la próxima película en ser analizada: “Todo Está Iluminado”.
Buenas, mis queridos discípulos, y bienvenidos a una edición muy especial de “Grandes Canciones de la Historia de la Humanidad”. Siendo agosto el mes en que se cumple el aniversario de tan magno acontecimiento como fue el nacimiento de la Entidad Masculina hace ya más de 20 años, hemos decidido que durante este mes echaremos toda la carne en el asador y hablaremos de los grupos/solistas/canciones que más le llegan a su emotivo corazoncito. Serán secciones más breves, debido a que cada una versará sobre un artista concreto. Sí, artista, porque no se me ocurre una mejor manera de definir a esta gente.
Grupo de la Semana: Los protagonistas de esta sección esta semana son unos maestros de ese estilo musical que Camela ya ha establecido como “rumba electrónico-gasolinera”, solo que llevado al extremo, con unas letras más maduras y mordaces, y unos efectos de sonido sublimes. ¿Su nombre? Los Desgraciaus.
Al igual que sucedía con “Hamburguesa Vegetal”, es complicado determinar el origen y procedencia del grupo, pues estos grupos suelen tomarse a cachondeo estos datos en sus respectivas weberías. Para muestra un botón: http://www.valladolidwebmusical.org/bandas/especiales/desgraciaus/INDEX.htm es su “especie de” página web oficial, donde todo está genialmente diseñado (en especial su presentación, todo un prodigio de creación artística que consigue de manera infalible que los ojos te lloren nada más verla, lo cual no es fácil), menos su biografía, la cual se toman a coña y no dan ni un dato medianamente creíble, aunque todavía no descarto ninguno.
Canción de la Semana: Pero si por algo deberían pasar a la historia “Los Desgraciaus” es por esa joya musical que todo el mundo debería tener en su emepetreses (o emepecuatros o aipod, lo que su sueldo le permita) llamada “Los Coches Chocones”, de la cual no existe un vídeo propiamente dicho, pero que se puede descargar fácilmente por otros medios (y no he nombrado ningún animal de granja, ni caballos ni mulas ni nada) poniendo simplemente el título de la canción. En yutube encontraréis también la canción, pero en vídeomontajes o cutre-actuaciones, por lo que no lo pondré aquí porque sería desmerecer semejante pieza musical a la altura de los grandes.
Esto ha sido todo por esta semana. La semana siguiente ésta, tu sección favorita, volverá con nuevas joyas que esperan ser descubiertas por el gran público, a la par que apreciadas. Y no os olvidéis, ninguna canción es grande si no se encuentra en... “¡Grandes Canciones de la Historia de la Humanidad!”
PD. Por cierto, la encuesta de ahí arriba sigue en pie, así como el sorteo de un dibujo, para el que tenéis que dejar vuestro nombre un par de posts más abajo. De momento sólo hay dos participantes en el sorteo, aunque hayan votado tres. Venga tontines, que no dibujo tan mal, snif snif
Recuerdo cuando les decía a algunas personas que conozco que “Guía del Autoestopista Galáctico” era una película que quería tener, o al menos que me apetecía ver antes de morir, y la gente me miraba como si hubiera enloquecido definitivamente, como si el único tipo de películas que viera son de arte y ensayo: señores, ¡¡yo pagué una entrada por ver Garfield!! Hace años que enloquecí completamente (jajajajaJAJAJAJAJA...me centro, me centro). No porque fuera un fan del best-seller de Douglas Adam, del que jamás en mi vida había oído hablar, sino porque el film, si bien no había sido un éxito de crítica ni de taquilla (al menos en España), tenía pinta de ser un auténtico disparate, pero no al estilo de sagas como (brrr) Scary Movie, donde lo que prima es el humor grueso, simple, escatológico, racista, misógino y homófobo, basado cada vez más en parodiar cuántas más películas, mejor, y que de entre tanta morralla se salve algún chiste logrado (como alguno ya presente en el trailer de la 4ª parte). Esta era un disparate a la inglesa, lo cual no quiere decir que sea más hilarante, pero si probablemente más disparatado y ácido que el del que presumen los yankis.
Si ya siendo inglesa la película ganaba unos cuantos puntos, lo que también la hacía subir enteros era el inmejorable reparto del que hacía gala la peli. Si alguno de ustedes ha visto esa joyita de historias amorosas cruzadas llamada “Love Actually”, reconocerá en el film a algunos de los más excéntricos actores de aquella historia: el protagonista es el semidesconocido Martin Freeman (en un papel que iba a interpretar Hugh Grant en un principio), que en “Love Actually” tomaba el entrañable rol del tímido doble de actor porno que se enamoraba de su compañera de reparto; otro de los secundarios imprescindibles en “Guía...” es Bill Nighy, vieja gloria del rock en “Love Actually” (y visto recientemente por mucha gente como el excelente Davy Jones en la segunda y tercera parte de “Piratas del Caribe”), que aquí se reserva un brillante papel hacia el final. Otros actores conocidos que intervienen aquí son Alan Rickman (el Snape de Harry Potter, aquí haciendo de narrador), John Malkovich, Mos Def (que hace poco acompañaba a Bruce Willis en “16 Calles”, última película dirigida por Richard Donner), Sam Rockwell (protagonista de la opera prima en la dirección de George Clooney) o Helen Mirren (“The Queen”).
La peli comienza de manera genial, perfecta, y es solo un aperitivo de los disparates que están por venir, con los delfines abandonando la Tierra al son de “Gracias por todo el pescado!”. Después se presentan los personajes principales, a los cuales en 2 minutos los conoces como si fueran colegas de toda la vida, gracias tanto a un guión muy equilibrado como a unos actores perfectos en sus papeles (hasta Sam Rockwell, el más histriónico y disparatado del reparto no desentona en exceso). Así, poco a poco vamos conociendo a muchas de las diversas razas que pueblan la galaxia, entre las que destacan los vogones, nacidos para gobernantes, aunque no tengan conocimiento alguno de nada, y no hagan nada hasta no rellenar el correspondiente impreso. Es esto precisamente, la ironía, los paralelismos y la mala leche a la hora de describir el panorama galáctico, lo que destaca de una historia en sí, bastante sencilla, pero que, una vez que la Tierra es destruida por un genial motivo que ahora no viene al caso, se va enrevesando minuto a minuto para formar un genial tapiz de perfectos y alocados personajes secundarios, entre los que destaca por encima de cualquier otro el robot Marvin, de tendencias maníaco depresivas, que se erige en lo mejor de la película.
Por último, destacar la notable ausencia de efectos especiales generados por ordenador. Es decir, haberlos hailos, pero a diferencia de casi cualquier película made in Hollywood, gran parte de los efectos son reales: las naves, los marcianos (creados por la empresa de Jim Henson (sí, sí, el de los teleñecos), casi todo en este film es real, lo que contribuye a otorgarle al film un mayor sentimiento de autenticidad, de honestidad.
En resumen, una peli cachonda, hecha no sólo para pasar un buen rato con los colegas, sino para reírse de uno mismo, para ver buenas escenas de ciencia ficción, para seguir la historia de amor del protagonista, o simplemente para reírse con los comentarios de Marvin o la caída desde el espacio de una ballena y su reacción al ver el suelo. Un film injustamente indefendido.